ELECCIONES EN SEGUNDA VUELTA DEL RECTORADO DE LA UNED

Sr. Ricardo Velez,

De antemano de agradezco la transparencia y la comunicación que está practicando con los alumnos que cursamos carrera en la UNED. Es un paso que pocos se han atrevido a dar y como bien dice ud. qué mejor que exista comunicación y transversalidad entre nosotros, los discentes y los docentes. Me alegro por ello, amén de la desilusión que me pueda ocasionar el no cumplimiento de sus pretensiones para con nosotros, puesto que estas elecciones a Rectoría me recuerdan un poco a las promesas innovadoras de Zapatero, su compromiso con los jóvenes y su posterior incapacidad para cumplir. En el caso que nos trata no todos lo somos, refiriéndome a “jóvenes” y quisiera transmitirle mi preocupación, que seguramente no es particular, puesto que la UNED es un medio que nos permite a TODOS el poder conciliar nuestras vidas profesionales y familiares con la intención de progreso personal mediante el estudio de una carrera.

Tengo 40 años, curso la Diplomatura de Educación Social, con una media de dos o tres asignaturas por año. Me quedan nueve para terminar la carrera. He realizado ya las dos prácticas de los cursos de 2º y 3º y me invade el terror sólo al pensar que me pueda afectar la implantación del Plan de Bolonia por no haber aprobado o cursado las asignaturas pendientes de 1º y deba acoplarme al nuevo programa con la consecuente pérdida de tiempo (años). Entiendo que se debería dejar acabar los estudios a quienes hemos empezado con el actual plan con el fin de no sentirnos obligados a abandonar, ya más por desesperación que por antojo, unos estudios que tanto nos han costado, sea en tiempo o en pecunio.

Además me gustaría transmitirle que pese a que existan ayudas para la adquisición de libros y material de estudio no me parece suficiente el abanico de personas a las que van dirigidas estas ayudas. Los libros SON CAROS, las matrículas son caras, los desplazamientos son caros y todo se va acumulando.

Y, para finalizar, quisiera también decirle que me parecería ya extremamente positivo el poder mantener, como lo estamos haciendo ahora, una vía directa con ud. Yo, personalmente no me siento representada por ningún delegado y me parecería mucho más cercano a nuestra problemática que ud pudiese mantener esta vía de comunicación, sin intermediarios ni tergiversación de nuestra problemática. No le pido que nos asista diariamente, pero si, por ejemplo, una vez al mes, mantener el contacto como si fuese ud a comprar al mercado y estuviese al corriente de la subida y bajada de precios “in situ”, cosa que, por otra parte, sólo se suele hacer en periodo electoral.

Quiero creer en usted porque su programa me gusta y parece ud. sincero. Y le voy a votar, pero for favor, no deje de escucharnos. No somos números, somos personas que realizan un esfuerzo tremendo para poder mejorar nuestras vidas en todos los sentidos. Formamos seguramente el grupo más numeroso de estudiantes, los de la UNED, que pone en práctica lo que tanto predican, la Educación Permanente.

Le pido que hable usted por nosotros y con nosotros.